Hay enormes expectativas sobre la fusión de la red Ethereum, para convertirse en cadena de bloques de prueba de participación. El próximo evento llamado The Merge, no va a mejorar de inmediato la escalabilidad, ni el costo de las tarifas. Esta actualización o cambio, permitirá que esta cadena de bloques, más adelante, pueda ser más veloz y más económica. Por ahora, esta red solamente deja de usar equipos o hardware, para aprobar y validar transacciones.
El aporte novedoso de The Merge, o de la fusión de Ethereum, es que pasará a ser una blockchain más ecológica o de menor demanda de electricidad. Ethereum es una criptomoneda, cuya red se valida con el consenso de la prueba de trabajo y ello requiere de hardware. Los críticos de la criptografía, señalan que el gasto eléctrico del funcionamiento de este modelo es muy grande. Aunque está demostrado que otras industrias, tienen un mayor consumo eléctrico, lo cual se justifica por su utilidad.
La fusión de Ethereum no es novedosa
Ya existen otras cadenas de bloques, que son más veloces y menos costosas que Ethereum y que se basan en contratos inteligentes. Por lo tanto, la fusión de Ethereum no plantea nada nuevo en ese sentido. Polkadot (DOT), es una blockchain basada en contratos inteligentes que es fragmentada. Para que Ethereum alcance mayores velocidades, se plantea que deberá fragmentarse. Eso quiere decir que una o varias transacciones no serán verificadas una por una, por toda la blockchain, sino por fragmentos distintos de la red. Esto aumenta la escalabilidad, porque una mayor cantidad de transacciones se procesan al mismo tiempo, como ya lo hace DOT.
Respecto al costo de las comisiones, TRON (TRX) es un ejemplo a citar. El modelo de validación, a través de los super representantes, hace que las comisiones de cada transacción, sean muy económicas. Después de la fusión de Ethereum, hará falta nuevas actualizaciones para que el costo de las tarifas del gas, sean menores. De hecho, TRX es una blockchain muy utilizada para transacciones de moneda estable, debido a lo bajo de sus comisiones.
Nodos validadores después de la fusión de Ethereum
Para ser un validador, un usuario necesitará 32 ETH para establecer un nodo, o se puede unir a un grupo, si no tiene la suficiente cantidad. A partir de entonces, podrá obtener rendimientos, que se estiman entre 10% y 15% de ETH al año. Por ahora, quienes bloquearon ETH para crear la segunda cadena de bloques, que se fusionará con la primera, no pueden retirar sus fichas. Existen empresas que, para motivar el bloqueo de ETH en los nodos validadores, emitieron derivados stETH.
Los usuarios pueden usar esos tokens sintéticos en intercambios descentralizados o en contratos inteligentes que los admite. Los tokens stETH, tienen una paridad 1:1 con ETH, aunque existen variaciones que en ocasiones los desvincula.
Más adelante, cuando la red ya esté fusionada, 12 meses después, los usuarios que tienen ETH bloqueado en nodos, podrán retirarlos. Ese proceso será en la actualización Shangai. Los que tienen derivados stETH, podrán canjearlos con el emisor, por ETH. El valor total bloqueado en nodos validadores es superior a 30 mil millones de dólares. En otras cadenas de bloque de prueba de participación, se puede bloquear y liberar tokens de los nodos, en cualquier momento.
Qué pueden hacer los mineros
Algunos mineros actuales de Ethereum, seguramente migrarán a otras cadenas de bloque. Sin embargo, en la red ETH, hay desarrollos en que podrán usarse los equipos de minería. Por ejemplo, las cadenas de bloque de capa 2, que requieren GPU. Estos equipos forman parte de una blockchain, como por ejemplo Livepeer, para transmitir video descentralizado. El usuario aporta el hardware y recibe recompensas por el mismo. También hay otras redes, en que la potencia de las GPU se alquila en línea a usuarios que requieren poder de cómputo, a cambio de recompensas.
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